Foto convertida en un retrato al carbón

Un retrato a lápiz de carbón  tiene un encanto atemporal: la finura del trazo, la suavidad de los matices de gris y la sutileza de las sombras desprenden una emoción única. Este estilo resalta la expresión del rostro, revela las miradas y captura el alma de un recuerdo con una elegancia sobria.

Gracias a la inteligencia artificial, una simple foto se convierte en unos instantes en una obra estilo dibujo a lápiz, con un resultado impresionante de realismo: trazos esbozados a mano, texturas delicadas y profundidad de los contrastes.

Después de la transformación automática, cada visual se recorta cuidadosamente, para una integración perfecta en el soporte elegido, por nuestro diseñador gráfico.

Importante: la IA a veces es caprichosa y fantasiosa, por ejemplo, al no tener en cuenta el número correcto de personajes representados : por favor, verifica bien tu previsualización antes de realizar tu pedido. 

Si la IA se ha equivocado, intenta de nuevo subiendo la foto de partida. Y si el error persiste, te invitamos después de haber realizado tu pedido, a contactarnos por correo para que podamos corregir manualmente este error.

El archivo final se envía a nuestro taller para una impresión profesional a elegir: cartel, cartel enmarcado, lona montada sobre bastidor u otros objetos de la vida cotidiana como la taza, la cantimplora o la bandeja de desayuno.

Las impresiones en póster, con o sin marco opcional, se realizan en papel Canson de 240 g fabricado en Francia. El Canson resalta los contrastes sin brillo, dando un efecto auténtico y artístico cercano a un original hecho a mano.

El resultado: un bonito retrato de excelente relación calidad-precio que combina la precisión de la tecnología con la emoción del dibujo tradicional, listo para regalar o exhibir en tu casa.